Mararía la de Femés, la innovadora versión de Yeray Rodríguez y Mario Vega inspirada en la obra canaria de Arozarena, es sin duda una de las propuestas escénicas más esperadas del año.
La obra cuenta con la interpretación de Mingo Ruano, Marta Viera y espacio sonoro con LAJALADA.
En 2023 se cumple el cincuenta aniversario de su clásico de la literatura canaria Mararía (1973), y dos artistas canarios, Yeray Rodríguez y Mario Vega presentan en Segunda Lectura: ‘Mararía la de Femés’, una oportunidad de reflexión sobre la herencia de un patriarcado instalado en la genética histórica y social que ha llegado a nuestros días en la voz de muchas Marías, de todas las Marías.
La obra, de la mano de Una hora menos Producciones, se estrenó el pasado mes de junio en el Teatro Pérez Galdós de Gran Canaria, con todas las entradas vendidas, y pronto tendremos la oportunidad de verla en el Teatro Circo de Marte, en La Palma.
El elenco
El nuevo montaje de este clásico cuenta con la interpretación de Mingo Ruano, Marta Viera y espacio sonoro con LAJALADA.
Marta Viera, de Lanzarote, es licenciada en Arte Dramático por la Escuela de Actores de Canarias. Su trayectoria profesional abarca distintas líneas de trabajo como son el musical, el cine y el teatro. Ha sido premiada como mejor actriz en tres ocasiones en distintos festivales internacionales y acumula cuatro Premios Réplica a Mejor Interpretación en 2013, 2015, 2021 y 2022.
Mingo Ruano es actor, director, cantante, bailarín, coreógrafo y docente. Es actualmente uno de los artistas canarios con mayor proyección profesional. Su versatilidad, constancia y amplitud de registros le han permitido situarse en un referente de las artes escénicas en Canarias. En el cine ha participado como actor en grandes producciones como La Mula, Cómo sobrevivir a una despedida, Palmeras en la nieve o La niebla y la doncella. Posee dos Premio Réplica de las artes escénicas al mejor actor en 2012 y 2016 por Abre el ojo y Última Trasmisión.
LAJALADA , encargada del espacio sonoro de Mararía la de Femés. Endémica de Las Palmas de Gran Canaria, Belén A. Doreste, empezó a enderezar sus instintos musicales en el Conservatorio Profesional de Las Palmas de Gran Canaria en la especialidad de Percusión. Compone y produce música para sus propios proyectos (antes Bel Bee Bee, ahora LAJALADA). En 2022 recibió el Premio Canario de la Música a mejor canción por y mejor disco pop- rock por DMÑNNS, álbum que aunaba como una única pieza, retazos de pop, electropop, viajes del sonoro descriptivo enchumbados de aires bucólicos y sonoridades electrónicas, y buenas descargas eléctricas.
La interpretación contemporánea.
En esta relectura, se da voz a una Mararía silenciada y relegada al olvido porque, según el propio Arozarena, “ahora por estar vieja nadie recuerda quién fue”.
«María la de Femés ahora por estar vieja nadie recuerda quién fue. Tenía los labios tintos como las flores de Pascua, delgados como cuchillos. Los ojos como dos higos como dos higos tunos con las pestañas de picos. Las pupilas como cuevas como las cuevas de guanches como un secreto de piedra. Los hombros de media luna los pechos como dos teides y el vientre como una duna. Tenía piernas y brazos tan lisos y tan redondos como las ramas de un drago. Altas las piernas, altas para mecerse en el aire como las palmas canarias. Era arisca como un cacto y al hombre que la rozara le sangrarían las manos. Alguien, no sé quién, me dijo “Para llamar a los hombres silbaba como los mirlos”
Me llamo María y soy de Femés, del sur y de abajo. Me llamo María, pero soy muchas marías. Todas las marías: las que llevan calladas desde antes de nacer y las que llevan gritando sin ser escuchadas desde que se cuenta el tiempo. Todas las bocas me apuntan, todos los dedos me señalan y todos los ojos me buscan, pero ningún oído me conoce. Es hora de dar voz a las marías, que han sido muchos siglos de silencio. Es hora de juntar en mi garganta la amarga soledad de tantas vidas y es hora de brindar por las valientes, que fueron ellas mismas pese a todo. Me llamo María y soy de Femés, del sur del sur. Soy todas las marías, tengo todos los nombres y todas las tragedias y guardo bajo mi piel de volcán, palabras que hierven, que no tienen sentido bajo tierra.
Mararía, la de Femés.